Hace poco, hablando con una amiga emprendedora y madre sobre Responsabilidad Social Corporativa (RSC), salió el tema de la conciliación familiar. Ha vuelto a mí esta conversación tras la entrevista esta semana de uno de los candidatos a la alcaldía de Madrid por Pepa Bueno.
Ella le pregunta en su programa de radio matutino, qué le parecen los horarios españoles de las empresas y él contesta que propone abrir más escuelas infantiles y colegios públicos por la tarde. Además de no contestar a la pregunta, él reafirma que esta medida permitirá el que «especialmente la mujer pueda conciliar la vida laboral». ¿Especialmente la mujer?
Resulta increíble seguir escuchando estas afirmaciones en las que se da por sentado que la conciliación familiar es sobre todo un tema femenino. Porque más allá del postparto y la lactancia, la crianza se trata de una cosa que ambos padres quieren disfrutar.
Las empresas tienen una gran responsabilidad social en términos igualdad. Dentro de sus políticas de RSC y Recursos Humanos debería ser normal el que los hombres se tomaran permisos de paternidad, excedencias o reducciones de jornada para disfrutar de sus pequeños. Y hacer todo lo posible para que a la hora de ejercer estos derechos no se penalizara al trabajador.
Empezar a ver a más padres en los parques sería así un sinónimo de mayor igualdad de género. Las empresas tendrían que basarse más en la valía del candidato a la hora de contratar o promocionar, y no si es un hombre o una mujer en edad de tener hijos. Y se empezarían a dar cuenta de que con una mayor flexibilidad de horarios y menos presentismo, sería posible que sus trabajadores siguieran vinculados a su proyecto empresarial.
Ya existen muchas iniciativas de padres al respecto, como las que contempla este manifiesto por la conciliación. Sin embargo, es hora de que las empresas pongan esta materia dentro de las principales líneas de acción de su RSC.